Scotch, grapas y mucha paciencia....

Hay veces en que el camino se hace cuesta arriba... en que mas que caminar, se escala, en rocas desnudas y piedras sueltas, con viento de cordillera y soplando de lado...

Hay veces en que la madrugada se llena de preguntas terribles, con respuestas atroces y miedos a saber que lo peor es lo unico cierto, que la verdad tiene cara de muerte o que el destino solo juega a darnos cuerda un rato, a ver donde llegamos antes que se aburra y nos corte las alas, cual mosca en manos de un pequeño sadico...

Son las veces en que las heridas antiguas duelen, como la artritis de un abuelo, o el recuerdo de antiguos horrores, presenciados como unico testigo, pero que ya a nadie importan...

Importar... que concepto mas dejado de lado en el ultimo tiempo... pareciera que hasta fuera una debilidad que a alguien le importe el resto; si no, preguntenle a nuestra nobilisima clase empresarial, a los dueños de las autopistas concecionadas, a los politicos, a los jueces, incluso entre los mismos pisoteados de siempre...

Que hacer cuando todo esta encima, cuando la sombra crece, cuando el corazon solo sabe de penumbras y temores, cuando no hay nada donde mirar o cielo al que rezar...

Entonces es cuando se requieren cosas que nos sanen el corazon...
El recuerdo de una caricia en la cabeza temprano en la mañana...
Columpios al atardecer de un año lejano,
Abrazos y besos de la epoca en que el cielo no tenia limites y la vida era un ancho oceano de oportunidades...
Una flor en la montaña, el canto de un pajaro, un momento en que solo se escucho la paz...

por ahora... solo una cancion...